Presentación del reto solidario 'Supérate', dirigido al bienestar digital de niños y jóvenes y protagonizado por Borja Ortiz, este viernes en Santander. EFE/ Román G. Aguilera

De Bilbao a Santander en pádel surf para visibilizar la adicción de los menores al móvil

Santander (EFE).- El deportista cántabro Borja Ortiz navegará en una tabla de pádel surf los cerca de cien kilómetros que separan por mar Bilbao de Santander con el objetivo de dar visibilidad al problema de la adicción de los menores a los teléfonos y dispositivos móviles.

Ortiz ha presentado este viernes, en la capital cántabra, la iniciativa «¡Supér@te! Reto solidario por el bienestar digital» con la que pretende afrontar este mes, si las condiciones del mar son las ideales, el desafío que le llevará en tabla de pádel surf desde la ría de Bilbao, a la altura del museo Guggenheim, hasta el Centro Botín, en la bahía de Santander.

En el acto ha participado la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, quien ha valorado la importancia que tiene el deporte en la transmisión de valores y el servicio que puede prestar para que los menores «cambien el uso excesivo de pantallas por relaciones reales» y disfruten de los paisajes de la región. «Ese es el mensaje de Borja Ortiz», ha subrayado.

Ortiz, que ha completado ya otros retos como día subir 26 veces seguidas en bicicleta al alto de Los Machucos, ha recibido el apoyo en mensajes grabados de los tres ‘embajadores de oro’ del reto, los campeones olímpicos cántabros Jan Abascal, Ruth Beitia y Diego Botín, que ha incidido en el mensaje de los beneficios de la práctica deportiva para separar a los más jóvenes de los dispositivos móviles.

La iniciativa está impulsada desde las organizaciones Proyecto Hombre, dedicada a la atención a las adicciones, y Nuevo Futuro, que crea entornos seguros para jóvenes y niños que no pueden vivir con sus familias, junto a la Obsession Surf. Cuenta con el apoyo del Gobierno de Cantabria, el Ayuntamiento de Santander y la Autoridad Portuaria de Santander.

Borja Ortiz ha avanzado que su objetivo es llevar a cabo este desafío el día 26 de junio, aunque ha señalado lo difícil que resulta establecer una fecha fija por la necesidad de que se den unas condiciones ideales en el mar, con un viento flojo y unas olas bajas. «Es difícil encontrar el día perfecto, porque solo se dan dos o tres días así al año», ha apuntado.

En caso de que no pudiese afrontar el reto ese día, buscará otra fecha que anunciará con un máximo de cuatro días de antelación, que es el tiempo con el que se pueden determinar las condiciones del mar.

Su idea es arrancar a las seis de la mañana desde la ría de Bilbao para llegar a la bahía de Santander sobre las nueve de la noche, donde tiene la intención de llegar hasta el Centro Botín, para acabar la prueba en la playa de La Fenómeno.

No prohibir, sino educar

En la presentación, han intervenido también la directora de Proyecto Hombre en Cantabria, Eloisa Velarde; la gerente de Nuevo Futuro en la región, Marta González-Estéfani; la concejala de Deportes de Santander, Beatriz Pellón; y el presidente del Puerto de Santander, César Díaz.

En el acto, previo a una mesa redonda para abordar esta problemática con la presencia del consejero de Educación, Sergio Silva, todos han coincidido en llamar la atención sobre el «problema silencioso» que supone la adicción de los niños y jóvenes a los dispositivos móviles y a las redes sociales y en recalcar la importancia de la educación para que puedan superar esa situación.

«La solución no está en prohibir, sino en educar, acompañar y enseñar a los jóvenes a utilizar las redes sociales de una forma responsable y crítica», ha defendido Velarde.

Para ello, González-Estéfani ha incidido en la importancia que tiene dar a los jóvenes alternativas de ocio, como el deporte, para lo que ha llamado a sumar esfuerzos desde las istraciones y la sociedad para dar visibilidad a este problema.

«Estamos inmersos en una mutación tecnológica que está cambiando nuestra forma de vivir y que abre un mundo de inmensas oportunidades, pero que viene acompañada de impactos negativos, sobre todo para la adolescencia», ha advertido Sáenz de Buruaga, quien ha apostado por integrar de «forma armónica» los dispositivos móviles en el desarrollo de los jóvenes y «pasar a la acción en todos los frentes» para evitar que caigan en la adicción.