Madrid (EFE).- La UCO ha efectuado este martes registros en Valencia, en concreto en el domicilio del exministro José Luis Ábalos, en la constructora Servinabar en Pamplona (Navarra), así como en Granada y en Bizkaia, todos ellos en el marco de la investigación judicial del conocido como caso Koldo.
Todas estas operaciones están relacionadas con el informe que el juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente pidió a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en un auto fechado el pasado mes de febrero, según han indicado a EFE fuentes cercanas al caso.
En dicho auto, el juez pedía a la UCO un informe a partir de llamadas telefónicas que conciernen a Ábalos, a su exasesor Koldo García y al presunto conseguidor de la trama, Víctor de Aldama.
Pedía una especial referencia a mensajes intercambiados con Ábalos, el ministro Ángel Víctor Torres o sus subordinados, con Santos Cerdán o «con cualquier otra persona aforada».
De esta forma, el juez buscaba comprobar las acusaciones de Aldama que en el Tribunal Supremo habló de supuestas obras públicas preadjudicadas y aportó un pantallazo para intentar probar presuntos amaños.
Registro en el domicilio de Ábalos
Durante este martes la Guardia Civil ha inspeccionado la casa de Ábalos, en Valencia, donde han clonado su teléfono y varias memorias extraíbles, en un registro que ha empezado a primera hora de la mañana y ha finalizado poco antes de las 17:00 horas y en el que ha estado presente el exministro socialista.
El juez ha ordenado el registro ante los indicios de que Ábalos pudiera haber participado, como ministro de Transportes, en presuntas adjudicaciones irregulares «a cambio de un precio o compensación económica», tras concretar la UCO las obras que indiciariamente «pudieran haber resultado indebidamente adjudicadas», a partir de las grabaciones intervenidas.
En el auto en el que ordena el registro, al que ha tenido EFE, el magistrado habla de «la solidez de los mencionados indicios» para motivar la entrada de los agentes. También se han practicado registros en varias empresas.
Asomado desde el portal de su edificio, Ábalos ha afirmado ante los periodistas que en la investigación en su contra hay «más sospechas que indicios» y que siempre defenderá su inocencia.
El exdirigente socialista está investigado en el Tribunal Supremo por presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias o cohecho en la causa que comenzó en torno a supuestas comisiones en contratos de mascarillas en plena pandemia, pero que se extiende también a posibles irregularidades en otras adjudicaciones públicas.
Registro en una constructora de Pamplona
Desde las 18:00 horas de este martes agentes de la UCO registran además la sede de la constructora Servinabar en Pamplona, investigada por supuestas irregularidades en la adjudicación de las obras de un túnel en Navarra.
Según ha podido constatar EFE, los agentes han accedido a las oficinas de la empresa, de la que es propietario Antxon Alonso y que saltó al debate político después de que el gobierno foral le adjudicara las obras para duplicar el túnel de Belate, como parte de una unión temporal de empresas (UTE).
Los agentes del instituto armado han practicado también registros en Granada y Vizcaya, también relacionados con el caso Koldo, según han informado a EFE fuentes cercanas al caso.
